Inmunice

Recomendaciones

Usted puede aumentar su Inmunidad al:

1. Revertir el Daño - Años de vida estresante han causado daño a su Sistema Inmune. Para ayudar a revertir esto, Immunice libera cientos de fitonutrientes que actúan a nivel molecular para mejorar la activación de las células T, mejorar la proliferación de los Linfocitos, de las células de la médula ósea y timocitos, aumentar los anticuerpos, leucocitos, citoquinas, y la producción de glóbulos rojos, aumentar los niveles de mastocitos, y estimular la fagocitosis y la actividad fibrinolítica plasmática del cuerpo.
2. Hacer Ejercicio Regularmente - El ejercicio regular eleva el nivel de leucocitos, células del Sistema Inmunológico que combaten la infección. El ejercicio también aumenta la liberación de endorfinas, hormonas naturales que aumentan su sensación de bienestar y mejoran la calidad del sueño, los cuales tienen efectos positivos en su Sistema Inmune. El ejercicio estimula el sistema cardiovascular, mejora el flujo sanguíneo, circula anticuerpos, elimina toxinas de músculos y órganos, elimina gérmenes, y ayuda a que los riñones y el sistema endocrino tengan un buen funcionamiento. 
El ejercicio moderado se debe repetir de forma casi diaria para que haya un efecto acumulativo que produzca una respuesta inmune a largo plazo. Si eleva su ritmo cardíaco durante sólo 20 minutos tres veces por semana, podrá aumentar la función inmune. Por ejemplo, una caminata de 30 minutos cinco días a la semana puede ayudar a reducir el riesgo de contraer un resfriado. Caminar fortalece el sistema cardiovascular y el flujo sanguíneo. Camine diez minutos, tres veces al día si no puede caminar 30 minutos por vez. También puede hacer tanto ejercicios cardiovasculares como entrenamiento con pesos ligeros para hacer que su cuerpo sea más resistente al enfrentarse y recuperarse de la enfermedad
4.Aumentar la Ingesta de Antioxidantes - Los radicales libres pueden causar mutaciones celulares, dañar la función inmune, y contribuir al desarrollo de enfermedades graves como el cáncer y el bloqueo cardíaco. Son producidas por los propios procesos naturales del cuerpo, las toxinas, la radiación, y una mala digestión. A diferencia de una molécula estable en la que cada átomo en su celda está rodeado por pares de electrones, los radicales libres llevan un electrón sin par que busca desesperadamente emparejarse con otro. Al atrapar un electrón de una molécula vecina (que luego hace que esa molécula se convierta en un radical libre), puede desencadenar una reacción en cadena que conduce al daño celular incesante que destruye la vía de citoquinas confundiendo la actividad del Sistema Inmune. El antídoto para los radicales libres son los antioxidantes. Cuando un antioxidante encuentra un radical libre, este cede libremente un electrón propio que satisface al radical libre e impide un daño fuera de control. Esto hace que el antioxidante se convierta también en un radical libre, pues le falta un electrón. Sin embargo, la reacción en cadena se detiene ya que el radical libre recién creado hecho a partir de los antioxidantes es muy débil y es poco probable que haga algún daño. Los antioxidantes también respaldan la desintoxicación del cuerpo al aumentar los niveles de Glutatión. El Glutatión se convierte en la apoptosis: proceso en el que las células "malas" mutadas se autodestruyen. 
5. Las frutas y verduras de colores brillantes contienen una buena fuente de antioxidantes. Entre estas tenemos bayas, cítricos, kiwi, manzanas, uvas rojas, col, cebolla, espinacas, patatas dulces y zanahorias. Otros alimentos buenos para el sistema inmunológico son: el ajo fresco (que tiene propiedades antivirales y antibacterianas) y la tradicional sopa de pollo. Algunas variedades de hongos como Reichi, maitake, y shiitake también tienen una influencia positiva sobre la función inmune.

6. Aumentar la Ingesta de Beta Caroteno - El Beta Caroteno y otros Carotenoides estimulan las células inmunes que combaten los radicales libres fortalecen la glándula del timo al proteger su cuerpo contra los efectos nocivos del estrés. También lo protege contra el cáncer al estimular los macrófagos para producir el factor de necrosis tumoral (que mata las células cancerosas) y aumentar la producción de linfocitos T y otras células asesinas naturales que atacan las células cancerosas. El Beta Caroteno también reduce el riesgo de padecer de enfermedades cardiovasculares al evitar que las grasas y el colesterol en el torrente sanguíneo formen placas arteriales. No existe una CDR (Cantidad Diaria Recomendada) para el betacaroteno, pero los estudios han concluido que por lo menos se necesitan 3 miligramos diarios para reducir el riesgo de sufrir de enfermedades crónicas. Entre las buenas fuentes de Beta Caroteno tenemos los albaricoques, los espárragos, las remolachas, el brócoli, el melón, la zanahoria, el maíz, los pimientos verdes, la col, los mangos, el nabo y la col rizada, las nectarinas, los melocotones, el pomelo rosa, la calabaza, el calabacín, la espinaca, las patatas dulces, las mandarinas, el tomate y la sandía.
7. Aumentar la Ingesta de Vitamina C - La Vitamina C ayuda a aumentar el número de glóbulos blancos como parte del arsenal del Sistema Inmunológico. También aumenta el nivel de colesterol bueno en su cuerpo, al reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Las últimas investigaciones indican que la vitamina C también reduce el riesgo de sufrir de cáncer de mama, de colon y cáncer de próstata. Una dosis diaria de 90 mg es lo recomendable. Se puede encontrar una buena fuente de vitamina C en las bayas, el brócoli, las coles de Bruselas, el cantalupo, la coliflor, las uvas, el melón Honeydew, la col rizada, el kiwi, el mango, la nectarina, la naranja, la papaya, los pimientos rojos, verdes o amarillos, los guisantes, las patatas dulces, las fresas y los tomates.
8. Aumentar la Ingesta de Vitamina E - La Vitamina E estimula la producción de células asesinas naturales (células inmunes que destruyen los gérmenes y las células cancerosas) y las células B (células del Sistema Inmune responsables de la producción de anticuerpos que destruyen las bacterias). También revierte parte del deterioro de la respuesta inmune provocada por el envejecimiento. Es recomendable una dosis diaria de 100 mg. Puede encontrar vitamina En en estos alimentos: Brócoli, zanahorias, acelgas, hojas de mostaza y nabo, mangos, frutos secos, papaya, calabaza, pimientos rojos, espinacas y semillas de girasol.
9. Incrementar el Consumo de Zinc - El zinc aumenta el número de las células T que combaten las infecciones, especialmente en personas de edad avanzada que a menudo tienen deficiencia de Zinc, y cuyo Sistema Inmune a menudo se debilita debido a la edad. El zinc también ayuda a reducir la incidencia de infecciones respiratorias agudas. Un meta-análisis que comparó varios estudios sobre el zinc descubrió que si se toma dentro de las 24 horas de iniciado un resfriado puede ayudar a reducir los síntomas. Una dosis diaria de 30 miligramos es lo recomendable. Si usted es un vegetariano estricto, puede requerir hasta un 50% de zinc más porque el cuerpo absorbe menos zinc de los alimentos vegetales. El zinc se encuentra en las ostras, las carnes rojas, el pollo, los frijoles, las nueces, el pescado, los granos enteros, los cereales fortificados y los productos lácteos.
10.Incrementar el Consumo de Selenio - El selenio se encuentra prácticamente en todas las células del cuerpo, aunque las concentraciones más altas se encuentran en los riñones, el hígado, los testículos, el páncreas y el bazo. Se trata de un potente refuerzo del Sistema Inmunológico, ya que activa la producción hormonal de la glándula tiroides, aumenta el número de células asesinas naturales, y moviliza las células que luchan contra el cáncer. Es conocido por sus actividades antioxidantes que protegen al organismo contra el cáncer, el ataque al corazón, el derrame cerebral, la degeneración macular, el herpes labial, el herpes zoster y el lupus, así como los efectos del envejecimiento. Una dosis diaria de 200 cg es lo recomendable. Entre las buenas fuentes de selenio están las nueces de Brasil, el atún, la carne de vacuno, las aves de corral y los panes enriquecidos, y otros productos de grano.
11. Dormir Adecuadamente - Usted puede haber notado que es más probable que pesque un resfriado u otra infección cuando no está durmiendo lo suficiente. La fatiga aumenta su susceptibilidad a las enfermedades. Un sueño reparador rejuvenece nuestros cuerpos y refresca nuestra mente. Durante el sueño profundo, su cuerpo produce células sanguíneas y eleva los niveles de oxígeno para fortalecer la función inmune. Al igual que el estrés, el insomnio eleva la producción de cortisol, que genera una inflamación en el cuerpo. Dormir bien, 7 a 9 horas para los adultos, es esencial para la buena salud.
12.Practicar Técnicas de Relajación - La reducción del estrés reduce los niveles de cortisol y mejora la calidad del sueño. Los estudios indican que las personas que meditan regularmente gozan de un Sistema Inmunológico con mejor respuesta. En un experimento, las personas que meditaron durante un periodo de 8 semanas produjeron más anticuerpos a una vacuna contra la gripe que las personas que no meditaron. Y además mostraron una mayor respuesta del Sistema Inmune cuatro meses después. Reír disminuye los niveles de hormonas de estrés en el cuerpo, mientras que incrementa el número de leucocitos (tipos de glóbulos blancos que combaten las infecciones). De hecho, la sola anticipación de un evento divertido puede tener un efecto positivo en su Sistema Inmune. Una buena manera de relajarse es hacer estiramientos de yoga durante unos minutos al día. Las posturas del yoga calman y relajan el sistema nervioso y la respiración lenta y profunda practicada junto con las posturas de yoga invocan un estado meditativo que alivia el estrés. 

Resultados: La combinación precisa de ingredientes en Immunice junto con un enfoque de mente-cuerpo abordan con precisión las vulnerabilidades de su Sistema Inmunológico.